Según el  estudio, nuestro paladar tiene 27 receptores para los sabores amargos y solo 3 para lo dulce, desde los tiempos prehistóricos este inteligente mecanismo protegía a los seres humanos de consumir alimentos venenosos.

Sin embargo esta programación natural no sirve para justificar que los niños y adolescentes no coman verduras como acelga, pepino y alcachofas, que encabezan el ránking de las más negadas. Con el tiempo y el aprendizaje del paladar, bien pueden acostumbrarse a consumirlas, pero como todo es un proceso cuyo elemento fundamental está en comer estas verduras rechazadas de diferentes formas.
La clave es nunca forzarlos (o sino crean rechazo) y presentarle las verduras en formas atractivas y con otros alimentos que si les gusten, para que poco a poco vayan incorporando el sabor.

ALIMENTOS CON HIERRO PARA NIÑOS Y BEBÉS
Sabemos que las anemias son una de las enfermedades a los que están expuestos los niños y bebés en sus primeros años de vida.
Veamos un listado de alimentos básicos que poco a poco debemos ir incluyendo en la alimentación de los niños y bebés para reducir el riesgo de anemia. Puedes incluirlas en papillas, purés, postres y tentempiés para los más pequeños.

• Carnes como cortes vacunos magros (lomo, solomillo), cortes magros de cerdo, hígado y morcilla. Si tu niño es muy pequeño, consulta con el pediatra la inclusión de carnes pesadas de digerir, como el hígado y la morcilla.
• Alimentos fortificados como leches de fórmula y harinas o cereales, sobre todo si recientemente han dejado de tomar leche materna.
• Suplementos dietarios recomendados por los pediatras para aumentar el nivel de hierro.

Un consejo para aumentar la absorción del hierro: acompañar estos alimentos con la ingesta de cítricos, como zumos de naranja, pomelo, limón y sus variantes o mezclas, que son deliciosas.

MENÚS PARA BEBÉS Y NIÑOS: PLATOS CON CEREALES
Ideas para los platos de los peques, tenemos un especial con cereales, pero no los de caja que tanto aman y muchas veces no son tan saludables, sino con cereales integrales.

Veamos las opciones para iniciar a los niños y bebés en los sabores que a veces se resisten:
Mini pizzas caseras: la idea es que hagas todo en casa, tanto la masa como la salsa. Una vez que está lista la masa, comienzas el armado de las mini pizzas con salsa de tomate y queso bajo en calorías, das el toque final con semillas de sésamo. También puedes lucirte haciendo la masa con harinas integrales de salvado o trigo salvaje.

Mini canelones de papilla: aquí tienes que lucirte con la masa de los canelones, que la puedes hacer con harina integral. Además, para potenciar la inclusión de cereales, al relleno de la papilla lo haces con sus purés favoritos e incluyes semillas a elección.

Galletas caseras: es un clásico de la cocina donde tienes miles de opciones, desde galletas con harina integral y chispas de chocolate, hasta incluir semillas de distintas clases. Además si los peques ya son un poquito grandes, pueden ayudar en la preparación, es una actividad muy divertida.
Pasta integral: puedes reemplazar la pasta normal, por pasta integral desde el inicio de la alimentación del niño, así se acostumbra a su sabor. Siempre acompáñala con salsa sabrosas de carne, tomate, pollo o salteado de verduras.